Si hay algo que los amantes del senderismo saben apreciar, es la combinación perfecta entre historia y naturaleza. En la Sierra de Guadarrama, un rincón encantador de España, se encuentra el Camino Schmidt, una ruta que nos transporta a los inicios del senderismo y nos sumerge en la majestuosidad de la montaña. Permíteme ser tu guía en esta crónica de viaje, mientras te narro mi experiencia recorriendo el Camino Schmidt en pleno mes de agosto, una travesía llena de descubrimientos y emociones.
El Camino Schmidt, bautizado en honor a Eduardo Schmidt, un apasionado senderista de origen austriaco y socio destacado de la Real Sociedad de Alpinismo de Peñalara, es mucho más que un simple recorrido. Es un vínculo con el pasado, una ventana al nacimiento del senderismo y al redescubrimiento de la majestuosidad de la Sierra de Guadarrama. Cada paso que damos en esta ruta nos conecta con aquellos primeros montañeros que se aventuraron a explorar estas tierras en los albores del siglo pasado.
Mi jornada comenzó en el Puerto de Navacerrada, un punto de partida lleno de emoción y expectativa. Desde allí, nos dirigimos al inicio del camino, deteniéndonos para absorber las explicaciones sobre la significancia de este lugar histórico. A pesar de que agosto nos regaló temperaturas abrasadoras en Madrid, al adentrarnos en la senda, una agradable brisa nos acogió, reduciendo el termómetro en al menos 10 grados. Una ventaja que seguramente agradeceremos si decidimos recorrer esta ruta en otras estaciones del año.
El Camino Schmidt, también conocido como PR-M/SG-5, nos lleva a través de un paisaje que contrasta entre la ladera norte de la cadena montañosa Siete Picos y el sereno valle de la Fuenfría. Caminamos entre los pinares de Valsaín al norte y Cercedilla al sur, dos tesoros forestales que albergan una de las masas mejor conservadas de pino silvestre en todo el sistema Central. Cada paso nos sumerge más en este abrazo natural, una experiencia que solo puede describirse como sublime.
La geografía del Camino Schmidt nos revela su esencia montañosa. Iniciamos en el Puerto de Navacerrada, siguiendo la ladera norte de Siete Picos hasta llegar a Collado Ventoso, donde cruzamos al lado sur en dirección al valle de la Fuenfría. Nuestro destino final es el acogedor Albergue del Club de Montaña de Peñalara, un merecido cierre para esta odisea.
La ruta está salpicada de marcas circulares de color amarillo que nos guían en nuestro camino, señales que nos aseguran que estamos siguiendo los pasos correctos de Schmidt. Afortunadamente, la dificultad de esta ruta es baja, lo que la hace accesible incluso para aquellos con menos experiencia en el senderismo. Sin embargo, es recomendable explorarla en otoño, primavera o verano, ya que en invierno suele vestirse de blanco con la nieve.
Desde una altitud inicial de 1858 metros en el Puerto de Navacerrada hasta la cima máxima de 1896 metros en Collado Ventoso, el camino nos invita a elevarnos y sumergirnos en la belleza de las alturas. A medida que descendemos hacia el Albergue del Club de Montaña de Peñalara, alcanzamos una altitud mínima de 1530 metros, un viaje que abarca 366 metros de desnivel.
Los bosques de pino silvestre dominan las laderas norte de Siete Picos, ofreciendo sombra y serenidad en nuestro camino. A medida que nos aproximamos a Collado Ventoso, el paisaje cambia, abriéndose a praderas de alta montaña adornadas con arbustos y hierba. Cada paso es un recordatorio de la diversidad y riqueza de la naturaleza que nos rodea.
El Camino Schmidt, en su renovado esplendor desde 2008, nos muestra el compromiso de mantener viva su historia. La calzada, delimitada con piedras, nos guía con firmeza a lo largo del recorrido, y los tramos dañados han sido restaurados con esmero. Cada paso que damos en esta ruta es un homenaje a aquellos que dedicaron sus esfuerzos a preservar y enriquecer esta experiencia para las generaciones venideras.
En resumen, el Camino Schmidt es una joya de la Sierra de Guadarrama que nos permite caminar en los pasos de los primeros amantes del senderismo. Con una mezcla perfecta de historia, naturaleza y belleza panorámica, es una aventura que merece un lugar en la lista de todo amante del aire libre y la exploración. No se necesita una preparación física extrema para disfrutar de esta ruta, y sus vistas y sensaciones seguramente dejarán una marca indeleble en el alma del viajero. ¿Estás listo para caminar en los senderos que marcaron el origen del senderismo? El Camino Schmidt te espera con los brazos abiertos.
Ruta compartidaDe Estación de Esquí Puerto de Navacerrada, C. Dos Castillas, 3, 28470 Cercedilla, Madrid a Fuente de Antón Ruíz por C. Dos Castillas.1 h y 12 min (5,0 km)Para ver esta ruta, visita https://maps.app.goo.gl/eCNoUuYy7iHj8ast9
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