Cueva del Destino

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Hoy les voy a contar nuestra experiencia en la Senda Ecológica de los Molinos en Navalagamella, Comunidad de Madrid.

Para llegar a la senda desde Madrid, nosotros hemos utilizado el transporte público de pasajeros. Para esto hemos tomado el bus 642 desde la estación terminal de Moncloa, y nos bajamos en la parada Solana (ctra.m510) numero 09956. La duración del viaje es aproximadamente 45 minutos dependiendo del tránsito.  

Una vez llegados, nos dirigimos al mirador del Hondillo, donde se encuentra el punto de inicio de la senda. Este mirador se encuentra a unos 700 metros de la parada de bus.

En el mirador vamos a tener una vista panorámica del recorrido que nos espera… pero la realidad es que es solo parte del recorrido que nos propone esta senda…

Desde ya le anticipamos que el comienzo es de lo más tranquilo… es una pendiente hacia abajo… pero no los quiero asustar… pero esa misma pendiente la tenemos que subir después de haber recorrido los casi 6.5km que tiene la senda completa en forma circular. La senda está debidamente señalizada, aunque es conveniente bajar el track que nos ofrece la comunidad de Madrid, para evitar tomar caminos secundarios, que puede hacer que nos dificulte el regreso al punto de partida.

Aproximadamente a los 40 minutos de caminata a nuestra izquierda…. Y sobre la ladera, vamos a encontrar restos de bunker correspondientes a la Guerra Civil española. Algunos de ellos se encuentran en muy buen estado, y son muy interesantes de visitar…

Las vistas que vamos a tener una vez que pasamos la zona del bunker, son maravillosas, pero en ningún momento vamos a tener reparo de vegetación. Por lo cual tenemos que ser muy previsores en la cantidad de agua que llevamos para esta senda.

Luego de casi una hora de caminata nos vamos a encontrar con un viejo puente que cruza un arroyito, en el cual nos podemos refrescar. Vamos a encontrar seguramente hacienda de las fincas próximas, y a partir de ahí tenemos que conservar nuestra derecha, en el camino.

Es bueno marcar, que a partir de ahí se termina el camino transitable para personas con cierta dificultad. Lo cual es bueno tener en cuenta en el momento de seguir el camino.

La Cañada Real Leonesa, acoge más de dos kilómetros de esta senda, donde en antaño grandes rebaños recorrían este arroyo o cañada.

Cuando seguimos por la estrecha senda vamos a alcanzar el río Perales, en el cual nos vamos a encontrar con antiguos molinos de cubo del Altillo y de Baltasar, que fueron utilizados para la molienda de cereales. El funcionamiento de dichos molinos, eran prensando el agua del rio arriba del molino, originando la elevación del nivel del agua, para incrementar la potencia o energía de la misma.

El agua se transportaba por el canal de piedra (caz) hasta que se introducía en el cubo, donde por la presión de la misma caída del agua movía el molino.

En las cercanías de los molinos el camino es en precipicio, lo cual no se recomienda circularlo en días de lluvia o posteriores a una tormenta. Los márgenes inferiores del río Perales constituyen un refugio de verdor y frescor en esta parte del recorrido de la senda.

El último tramo de la senda lo hacemos ya en llano, hasta volvernos a encontrar con los primeros 400 metros iniciales, solo que esta vez es cuesta arriba.

La senda la hicimos en un tiempo aproximado de 5 horas… tomándonos el tiempo para comer y refrescarnos en distintos puntos del camino.

Si bien la información de la senda es de nivel bajo, para nosotros no es tan baja, ya que hay tramos en el que se debe trepar o tener un buen calzado para no perder la estabilidad al transitar la senda.

Ya has transitado la senda? cuentanos tu experiencia

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