Es una etapa cargada de historia, en la que se entrelazan la espiritualidad del camino con el rico legado cultural de estas localidades de la provincia de Toledo. Este trayecto de unos 22-24 kilómetros ofrece una experiencia única a los peregrinos que recorren estas históricas tierras castellanas.
Camarena: Historia y legado
El recorrido comienza en Camarena, un municipio con profundas raíces medievales que ya aparecía mencionado en documentos del siglo XIII. Durante siglos, fue un punto estratégico en las rutas que comunicaban Madrid con Toledo y Extremadura.
Entre sus monumentos destaca la iglesia de San Juan Bautista, construida entre los siglos XV y XVI, con su característica mezcla de estilos gótico y mudéjar. Este pueblo agrícola, rodeado de viñedos y campos de cereal, era un punto de descanso para viajeros y peregrinos que avanzaban hacia el Monasterio de Guadalupe.
Fuensalida: Un cruce de caminos
Tras abandonar Camarena, el camino conduce hacia Fuensalida, una localidad con un notable pasado ligado a la nobleza y a la producción textil. En el siglo XV, se convirtió en el centro de los dominios de los Condes de Fuensalida, quienes dejaron su huella en el Palacio de Fuensalida, hoy sede del Gobierno de Castilla-La Mancha en Toledo.
Fuensalida es conocida también por su iglesia parroquial de San Juan Bautista, de estilo gótico-mudéjar, que se alza como testigo de la rica historia de esta villa. El pueblo sigue siendo un referente de tradición y hospitalidad, con una economía basada en la industria y la artesanía, incluyendo la fabricación de calzado.
Torrijos: Capital histórica y monumental
El tramo culmina en Torrijos, uno de los enclaves más destacados de esta ruta. Torrijos vivió su mayor esplendor en el siglo XV bajo el mecenazgo de Teresa Enríquez, conocida como «la loca del Sacramento», quien promovió numerosas obras religiosas en la villa. Gracias a ella, Torrijos se consolidó como un importante centro de cultura y espiritualidad.
Entre sus monumentos más emblemáticos destacan:
- La Colegiata del Santísimo Sacramento, de estilo gótico-renacentista, construida en el siglo XVI por iniciativa de Teresa Enríquez.
- El Palacio de Pedro I, un elegante edificio mudéjar convertido hoy en Casa Consistorial.
- La Capilla del Cristo de la Sangre, que refleja la devoción de la villa.
Torrijos era un importante lugar de paso en el Camino Real, donde los peregrinos podían descansar y abastecerse antes de continuar hacia el suroeste.
Descripción del trayecto
- Distancia total: 22-24 km (Camarena-Fuensalida: 8-10 km; Fuensalida-Torrijos: 12-14 km).
- Dificultad: Baja, con caminos predominantemente llanos, ideales para un avance cómodo.
- Paisaje: El camino discurre entre campos agrícolas y llanuras características de La Sagra, ofreciendo un ambiente de serenidad y conexión con la naturaleza.
Reflexión histórica y espiritual
Este tramo del Camino Real a Guadalupe encarna siglos de fe, esfuerzo y cultura. Las localidades de Camarena, Fuensalida y Torrijos no solo fueron testigos del paso de peregrinos hacia el Monasterio de Guadalupe, sino que se desarrollaron como nodos clave en la red de caminos que unían Castilla con Extremadura. Hoy, estas tierras invitan a los caminantes modernos a revivir una experiencia que une lo histórico con lo espiritual.